Solo comentar la experiencia que ha sido pilotar el Polaris RZR.
La versión que pude conducir tenia ligeras modificaciones como era la mejora del sistema de amortiguación con el que Quim había aumentado la altura del RZR en unos centímetros más.
La primera sensación cuando te sientas en este vehículo es muy agradable, los asientos son cómodos y la posición de conducción perfecta.
Los primeros metros me sirvieron de toma de contacto, una dirección muy suave me hacia mantener en constante movimiento los brazos corrigiendo la dirección del RZR. En la segunda pasada por el circuito me anime un poco y me atreví a darle más alegría al acelerador.
La respuesta muy enérgica, el vehículo te pide que le des caña, aprovecho los tramos rectos para correr y como noto que responde muy bien, ofreciendo una buena estabilidad y agarre, me atrevo con alguna pequeña derrapada. Pero aquí entra el sentido común y el propio conocimiento de mis limitaciones y vuelvo a la realidad, no soy un piloto de carreras en medio de una Baja o un Raid.
Y entonces pruebo lo que es el badeo y la superación de obstáculos. Increíble !! sube por una pared de tierra casi vertical.
Al final de la jornada de pruebas, Quim y yo estuvimos comentando el buen comportamiento del RZR y me explico su experiencia en la primera carrera sobre hielo que organizo Polaris en el circuito de Gran Valira en Andorra.
En resumen, Polaris a conseguido con el RZR unir la estética racing, el confort de conducción y la perfección mecánica en un solo vehículo y prueba de la aceptación de este por el publico es el nivel de ventas alcanzado durante el año pasado.
Próximo paso comparar el RZR con la versión "S" del 2009.